sábado, 30 de julio de 2016

#LARONDA43 – PUBLICIDAD Y PROMOCIÓN DE LA CERVEZA

Este año los blogueros cerveceros no paramos ni en verano y seguimos opinando sobre todo aquello que rodea al mundo de la cerveza. En esta ocasión Ana, desde su blog "El retrogusto es mío” nos propone un tema con dos vertientes:


La publicidad en las grandes corporaciones cerveceras y lo distinta que es de la seguida por las pequeñas micros.

Y una segunda vertiente que nos invita a analizar como es y cómo debería ser la publicidad  en la escena craft.



Antes de nada quisiera realizar dos aclaraciones:

* La primera últimamente la estoy repitiendo hasta la extenuación: no creo en la distinción conceptual industriales-artesanales, para mí los términos “craft/artesanal” hacen más referencia a un movimiento que a una distinción real en el producto final, que en definitiva a mi lo que me interesa es la buena cerveza, venga de donde venga. En cualquier caso todo este tema me empieza a resultar cansino.

* La segunda va sobre el término Marketing, que he eliminado del título de esta ronda, ya que entiendo que estamos hablando únicamente de publicidad, y el termino marketing engloba mucho más: Investigación de mercados, definición de cliente objetivo, distribución comercial, puntos de venta, política de precios, estrategia publicitaria…

Dicho esto paso sin más al tema que nos ocupa:


1 – EVOLUCIÓN DE LA PUBLICIDAD EN EL MUNDO DE LA CERVEZA INDUSTRIAL

En la invitación de la ronda se nos enfrenta dos anuncios publicitarios, uno de la escena craft (Beavertown) positivo y divertido y otro de Budweiser, emitido en la superbowl 2016, agresivo y contundente (aunque no tanto como aquel de 2015 y del que ya hicimos su análisis en su momento en este blog… dejo enlace (Link)

A ver, veo cierta premeditación al enfrentar estos dos anuncios como si estuviésemos diciendo que en la escena craft son divertidos y las industriales son malas y agresivas…. Y la verdad, nada más lejos de la realidad.

Si algo ha caracterizado desde siempre a los anuncios publicitarios de cerveza de las “industriales” ha sido su positividad y capacidad para asociar el consumo de cerveza a situaciones cotidianas de nuestra vida... habitualmente positivas.

Los spots publicitarios han sido graciosos, simpáticos, tiernos (recordar el de Budweiser del perrito y el caballo en la superbowl de 2014).


En distintas épocas las grandes hicieron anuncios para reforzar la imagen de marca, veíamos o pensábamos en un color y automáticamente nos recordaba a una marca de cerveza. Lo cierto es que funcionó a ver en que marca de cerveza pensamos cuando hablamos del color verde.

De siempre se han vinculado campañas publicitarias a grandes eventos deportivospara recordarnos lo bueno que es beber cerveza para la salud, tanto que hasta la muerte bebía cerveza lo cual nos libraba de una muerte segura.


En una época incluso fueron machistas, por suerte han ido evolucionando con la sociedad y hoy detestaríamos estos anuncios, aunque en su día fueron de gran éxito. Aunque se siguen haciendo de manera más sutil (recordar el de Heinneken donde la chica enseñaba a sus amigas su vestidor lleno de ropa y él enseñaba el suyo lleno de cerveza).


En cualquiera de los casos el buen humor nunca ha abandonado a los anuncios publicitarios de las grandes corporaciones industriales y de cerveza en general. 

¿Hacia donde evolucionará? Pues quién lo sabe, los creativos siempre están ahí para sorprendernos. Pero como ya he dicho seguro que ira de la mano de las tendencias sociales, ya sabemos de lo incrustado que está el consumo en los hábitos sociales.

Pero centrándonos en los últimos anuncios de Budweiser y otras industriales arremetiendo contra la cerveza artesanal… seamos sinceros, tenía que llegar. La principal estratégica de la escena craft ha sido presentar sus productos desprestigiando a la cerveza de las industriales y esto es así desde que en los años 80 los primeros productores artesanales americanos intentaran abrirse camino entre gigantes como Budweiser y Miller (en Inglaterra o Bélgica no hubo necesidad ya que las micros siempre estuvieron arraigadas a su cultura cervecera).

Pero lo cierto es que el verdadero punto de inflexión se ha producido en los últimos años cuando el movimiento craft ha crecido, se ha internacionalizado y lo más importante, ha tomado conciencia de sí mismo. De hecho la explosión se produjo cuando compararon su crecimiento con la producción de Budweiser a lo que estos respondieron con aquel famoso anuncio de la superbowl de 2015 y del que hubo rápida respuesta por parte de muchos productores craft, como siempre utilizando el buen humor.


Las grandes corporaciones siempre fueron inmunes ante esos ataques, cuando una micro molestaba o tenían éxito se la comían y ya está, pero ahora el ataque no viene de una micro, sino de un movimiento formado por miles de micros y que venden “un producto” que dicen mejor que el suyo.

Pues sí, tenía que ocurrir, las grandes contratacaron a través de un instrumento que siempre han manejado muy bien… la publicidad. Budweiser está defendiéndose, poniendo en valor las virtudes de su producto y ridiculizando algunas de las poses que caracterizan a las artesanales y sus bebedores habituales y como hemos visto los elaboradores artesanales no se han quedado quietos.



2 – ESTRATEGIA PUBLICITARIA EN LA ESCENA CRAFT

Las micros, como su nombre indica son pequeñas, no suelen tener recursos para contratar los servicios de unos buenos asesores que diseñen su estratégia y mucho menos para hacer estudios de mercado o diseñar y producir una campaña publicitaria a gran escala.

Quienes las dirigen estas micros normalmente son cerveceros, saben elaborar muy bien cerveza, pero en otros aspectos de la gestión empresarial se quedan un poco cortos y se mueven más o menos por intuición o con unos conocimientos básicos.

Evidentemente no voy a hacer el trabajo de análisis de que tienen que hacer cada una de las micros craft, por que tendría que realizar un ejercicio de análisis en profundidad que no he hecho, pero me da la impresión de que se están equivocando en muchos aspectos.

Yo les recomendaría que aunque fuera un nivel básico hiciesen un análisis de quienes son, quienes son sus competidores reales (aquellos que les quitan ventas), quienes sus clientes objetivo y como llegar a ellos y enfocaran su publicidad para llegar a ellos.

Algo que suele funcionar muy bien a la hora de hacer publicidad y le ha funcionado muy bien a las pequeñas es utilizar la creatividad, que no es exclusiva de las grandes corporaciones y sus equipos y agencias de marketing. Y aprovechar lo mejor que se pueda de los medios de los que se dispone para transmitir una idea un mensaje.


O hacer campañas publicitarias conjuntas, aquí lo que se trata de promocionar es el consumo de la cerveza artesana en general, algún evento o colaboración entre elaboradores y no una marca en particular. Que varios productores pequeños se unan para realizar una campaña publicitaria permite que puedan acceder a las mismas armas publicitarias de las grandes y que normalmente no son accesibles por coste. 


Algo que suele funcionar muy bien cuando eres pequeño es ver lo que han hecho las empresas de éxito que siguen nuestro modelo de negocio. Dentro de la escena craft hay empresas que han crecido tanto que en la práctica podríamos considerar industriales (Sierra Nevada o Brewdog por ejemplo).

Seguro que antes se han enfrentado a los mismos problemas que tienen las micros pequeñitas ¿cómo los resolvieron? Nada más sencillo que ver que han hecho y como enfocaron y enfocan su publicidad, donde ponen sus anuncios, que medios utilizan, cómo son y que tratan de transmitirnos a través de ellos.


Ahora que son grandes dudo que no utilicen los mismos instrumentos que manejan las industriales, estarían desaprovechando instrumentos muy potentes si no lo hicieran. Un buen análisis basado en el marketing puede orientar sus campañas publicitarias de manera más efectiva.

Y hasta aquí mi aportación a esta ronda. Saludos!!!



martes, 26 de julio de 2016

MIS CERVEZAS DE JUNIO 2016

El mes de Julio está resultando un mes interesante y de gran actividad cervecera, aunque este blog, se ha visto resentido en sus publicaciones debido a los viajes y las contadas ocasiones en las que me he podido sentar delante de un ordenador.

Unos viajes en los que hemos podido visitar a un buen número de fabricantes y de los que hemos vuelto cargados de cervezas. Trataremos de ir desgranando todo ello en los próximos post, pero ahora toca sentarse a escribir y recordar que fue del ya lejano mes de Junio y hacer un resumen, comentando algunas de las cervezas que pudimos probar, algunas de ellas entre mis favoritas.


DOUGALL'S RAQUERA

Que un elaborador artesanal se exponga a elaborar una Pilsen siempre me ha resultado cuanto menos “peligroso” y sin duda un acto de valentía. Me parece un estilo complejo y cuyo espacio comercial se encuentra bien cubierto por un puñado de buenísimas cervezas de gran consumo ¿por que elaborar una pilsen? aún así, la gente de Dougall's lo ha hecho... así que habrá que probarla.

Color amarillo claro, algo nebuloso con una buena capa de espuma. Aroma a levadura, notas florales/herbales y sutilmente lupulado. El sabor con notas herbales y caramelo en mi opinión se queda algo corto. Cuerpo medio, carbonatación suave y regusto corto, casi inexistente.

Como conclusión podemos decir que es una cerveza que cumple, sin más, es muy bebible sobre todo en días calurosos, pero existen mejores opciones en el mercado y supermercado.

Nota de El Baúl de las Cervezas: 6/10


GRIMBERGEN ZOMMER WIT

En alguna ocasión he comentado que desde que la producción que nos llega a España se fabrica en Francia, las Grimbergen prácticamente han desaparecido de mi casa. Así que cuando encuentro alguna elaborada en Bélgica no dudo en comprarla.

Esta Zomer Wit, como no podía ser de otra forma, es una refrescante witbier, dorada, ligeramente turbia y espuma blanca y espesa. En el aroma predominan las notas cítricas, acompañado de malta y especias. El sabor está bastante bien, quizás algo dulce. Acompañan las notas herbales y ácidas típicas del trigo y especias. En boca el alcohol no es evidente, cuidado con esto ya que es una cerveza muy bebible. Para terminar el regusto es algo amargo.

En general sensación general, que me hace recuperar la fe en esta marca, de la que esperemos que se vean más habitualmente cervezas como está, sencilla pero recomendable.

Nota de El Baúl de las Cervezas: 6,5/10


PõHJALA - RUKKIRÄÄK

La curiosidad inicial por beber una cerveza de Estonia fue la motivación, aunque después al consultar mi base de datos me he dado cuenta que, aunque hace ya muchos años, tengo una larga lista de cervezas de este país. En cualquier caso, últimamente había visto bastantes cervezas de este productor por las redes sociales y me picaba la curiosidad.

Se trata de una cerveza de centeno, y la verdad es que está presente en todo momento. Color ámbar oscuro, cremosa espuma beige. El aroma es maltoso, algo acaramelado y afrutado. En el sabor dulce con notas cítricas. Alguna especia y alguna nota tostada al fondo. Buen equilibrio y más complejo de lo que me parecía inicialmente. Regusto largo dulce-amargo y seco.

Es de estas cervezas que te quedas satisfecho, buena elaboración que quizás merecería ser probada de nuevo… no sé si tendré ocasión.

Nota de El Baúl de las Cervezas: 7,5/10


3 FONTEINEN – OUDE GEUZE

Armand Debelder mezclador de Lambics fue popular por su bar/restaurante, Drie Fonteinen, aunque en la actualidad sea reconocido como cervecero. A sus espaldas creaciones como esta “Oude guueze”.

Es una gueuze de color naranja, algo nebulosa y una buena espuma blanca. Posee un elegante y sutil aroma a hierba, cuero y cítricos. Pero cuando tomas el primer sorbo todo cambia, el sabor es potente, donde predominan los cítricos, como el limón y alguna nota amarga. La sensación en boca es cosquilleante y el final es ácido y seco. En definitiva, pienso que es una mezcla magistral.

Me encanta beber Lambics en verano, así que no es extraño que por estas fechas pueda beber alguna de mis gueuze favoritas y esta 3 Fonteinen, se encuentra entre ellas… aparte de ser uno de esos clásicos belgas ineludible si te gustan este tipo de cervezas.

Nota de El Baúl de las Cervezas: 9/10


TILQUIN QUETSCHE

El mes pasado probábamos la Tilquin Gueuze y este la llamada Tilquin Quetsche, una verdadera maravilla, de la que me hubiera gustado escribir una entrada y que no lo he hecho falta de tiempo. Para empezar hay que aclarar que “quetsche” es una variedad de ciruela pequeña que madura a mediados de agosto en algunas zonas como Alsacia, de donde son las empleadas en la elaboración de esta cerveza.

Color naranja intenso, nebuloso. Espuma blanca que se disipa más o menos rápido. En el aroma, junto al típico a lambic (agrio con notas a hierba y queso) se distinguen perfectamente la ciruela. El sabor es afrutado a ciruelas, las notas ácidas y afrutadas conviven en perfecta armonía y equilibrio. De cuerpo medio y con una sensación en boca seca y amarga que se acentúa en el regusto.

El resultado es una cerveza elegante, equilibrada y muy armoniosa, toda una delicatesen y por supuesto una delicia beberla.

Nota de El Baúl de las Cervezas: 9/10


CHIMAY GRANDE RESERVE 2014

La Chimay “azul” es, sin duda, una de mis cervezas favoritas y posiblemente una de las que más me gusta dejar que pasen los años por ella antes de beberla. Quizás por ello, siempre siento cierta curiosidad al probar la versión envejecida en barricas de madera. Por cierto, una versión en la que últimamente Chimay está poniendo mucho esmero, solo hay que fijarse en su “Grande Reserve 2015 – Vieillie en fûts de bois”.

Color marrón rojizo oscuro, con un dedo de espuma beige esponjosa y menos cremosa de lo esperado. Mantiene el aroma maravilloso e inconfundible de Chimay, afrutado, uvas pasas, ciruelas, caramelo, vainilla y una pizca de alcohol. El sabor es más suave si la comparamos con la “azul” sin envejecer. De nuevo predominan las notas a fruta madura y uvas pasas, caramelo, notas a levadura (pan), especias y madera... Sabor delicioso y redondo. Gran cuerpo, en boca el alcohol está perfectamente escondido y deja ese regusto tan típico de las Chimay.

¿merece la pena? La respuesta es sí y no, lo cierto es que se obtiene resultados muy similares guardando adecuadamente una Chimay azul “normal” uno o dos años, si bien es cierto que los matices a madera dan un plus que nunca conseguiremos envejeciéndola en casa.


Nota de El Baúl de las Cervezas: 9,25/10