viernes, 30 de septiembre de 2016

ALASKAN SMOKED PORTER VINTAGE 2011

Mis esfuerzos me había costado conseguir mi primera Alaskan Smoked Porter, como suelo decir, eran otros tiempos y conseguir cualquier cerveza americana era una odisea.

Había leído en múltiples ocasiones sus virtudes como cerveza para guardar y dejar envejecer, pero solo había podido conseguir una botella ¿iba a esperar cinco años para probarla? evidentemente no, así que me la bebí al día siguiente de recibirla.

Resultó ser una cerveza espectacular, repleta de delicioso humo, mucho más sutil que en las Rauchbier alemanas que conocía, también tenía matices a caramelo, uvas pasas y chocolate.

En los foros cerveceros que frecuentaba, donde siempre leía con atención las secciones de envejecimiento seguían hablando de las propiedades de esta cerveza, así que no tuve más remedio que comprar otra, esta vez con la decidida intención de dejarla envejecer varios años… pero la carne es débil y una vez en mi baúl recordé su agradable sabor y pasó inmediatamente a mi frigorífico, en menos de una semana bebía mi segunda Alaskan Smoked Porter.

La tercera ocasión fue hace poco más de un año, Andrés del Lúpulo Feroz de Oviedo, conociendo mi afición al envejecimiento me tentó: “tengo dos botellas de Alaskan Smoked Porter Vintage años 2008 y  2011 ¿te interesan?”. Vamos ¿Cómo no me iban a interesar? Y así conseguí la cerveza que hoy ocupa este blog.

Evidentemente, si no eres incapaz de envejecerla en casa, mejor que me la den ya envejecida y con todas las garantías de que se ha hecho correctamente.


ALASKAN BREWING CO

Antes de contar aquí como es esta Alaskan Smoked Porter Vintage 2011, voy a dar unas pequeñas notas para completar de qué estamos hablando.

Es una cerveza elaborada en Juneau (Alaska), comunidad costera sin carreteras que la conecten con el resto de Estados Unidos, de hecho para llegar a ella debe utilizarse el barco o el avión.

Pues en este lugar Geoff y Marcy Larson empezaron a elaborar cerveza prestando especial atención a los ingredientes y recetas autóctonas. Esta Alaskan Smoked Porter se elabora con malta que se tuesta sobre madera de aliso durante tres días en una fábrica de pescado del mismo pueblo, esto le da un peculiar sabor tostado.


CATA:

De color marrón oscuro, tan oscuro que casi podríamos decir que es negra. Al derramarla deja una corona de espuma beige de aproximadamente un dedo, que, aunque se reduce a una fina capa permanece ahí durante toda la degustación.

El aroma es sutil, pero son perceptibles las maltas tostadas y el humo, más atrás alguna nota a vainilla y jerez. Realmente es muy agradable, aunque hubiera sido preferible una mayor intensidad y que los matices llegaran más nítidos.

Su sabor cobra vida cuando la cerveza adquiere cierta temperatura. El ahumado es muy suave y se entremezcla con un sabor a caramelo. Las notas a uva pasas, como si de un jerez se tratase redondean un sabor muy equilibrado y sutil, de esos para saborear muy lentamente. Buen cuerpo y un regusto a madera seco no muy largo.


NOTAS FINALES Y CONCLUSIONES

La primera nota es una recomendación, si esta cerveza cae en vuestras manos, prestar especial atención a la temperatura de consumo. Cuando cato una cerveza lo hago a cierta temperatura para que todos sus matices se desarrollen adecuadamente, pero en este caso necesitó más. De hecho inicialmente me pareció ciertamente decepcionante hasta que a medida que fue adquiriendo temperatura desplego todos sus argumentos. Aconsejaría una temperatura no inferior a los 12º C para disfrutarla al 100%.

Con tan solo 6,5% de contenido alcohólico a priori podría parecer que no es una excelente candidata a envejecer, pero voy directamente a la cita de Patrick Dawson en su libro sobre envejecimiento de cervezas: “los fenoles derivados del ahumado actúan como conservante en esta cerveza tal y como haría un nivel de alcohol más elevado”. Lo cierto es que es una cerveza excepcional para envejecer.

Una cuestión recurrente en este tipo de elaboraciones es el precio, son cervezas caras incluso frente a su homónima sin envejecer y te planteas si compensa o no. Creo que la mejor opción es sin duda envejecerla uno mismo, siempre y cuando se guarden las condiciones óptimas para ello. Yo espero probarlo en breve.

Su característica más notable es la suavidad de su ahumado, ya destacable en su versión sin envejecer, pero que en este caso llega al summun. Beber una pinta de una rauchbier puede llegar a cansar si no eres muy acérrimo al estilo, pero en este caso la pinta de 65 cl. ha sabido a muy poco.

El resto de matices han quedado más equilibrados que en su misma versión sin envejecer. A su vez el caramelo se ha redondeado más y han aparecido o se han acentuado nuevas notas a uvas pasas y a jerez.

En principio la teoría dice que ha podido perder algo de cuerpo, pero en boca sigue llenando y no he apreciado muchas diferencias en este sentido.

Lo cierto es que me ha encantado y ya estoy deseando probar su versión Vintage 2008 que todavía reposa en el Baúl de las Cervezas… en realidad, no creo que aguante mucho ahí.


Valoración de El Baúl de las Cervezas: 9,25/10


Ficha Técnica:
Fabricante:
Alaskan Brewing CO.
Elaborada en:
Juneau (Alaska – USA).
Estilo:
Cerveza Ahumada.
Color:
Marrón oscuro.
Alcohol:
6,5% Alc.
IBUs:
N/A
Temperatura:
10º C.
Servir en:
Copa Snifter.


lunes, 26 de septiembre de 2016

LEBBE L’AMALTHÉE

Hoy quería compartir mi último descubrimiento, Lebbe L’Amalthée, comprada por casualidad en una tienda especializada en vinos en la localidad pirenaica de Argelès-Gazost. Que no solo ha resultado ser una gran cerveza sino que tras ella esconde la interesante figura de su elaborador.


FERME BRASSERIE LEBBE

Lo cierto es que me ha costado bastante encontrar información en la red, un puñado de enlaces que remiten a las webs de ratings de esta cerveza y poco más. La explicación se puede encontrar en el hecho de que no estamos ante un elaborador de cerveza convencional, por lo menos en nuestros días.

Lebbe es una explotación agrícola, donde Pierre Lebbe, un granjero belga afincado en Villefranque (localidad cercana a los Pirineos franceses) se dedica producir leche de cabra (unos 90.000 litros/año) y queso. Como tarea secundaria elabora esta cerveza orgánica en lotes muy pequeños, unas 600 botellas al mes, unos 120 hectolitros de cerveza al año, embotellada manualmente.

Si bien encontrar información de Brasserie Lebbe no es tarea fácil, sí lo es cuando buscas información sobre Pierre Lebbe, preocupado por la ecología, reciclaje y autonomía energética de su granja, se convirtió en un pionero en Francia en la utilización de la energía producida por el estiércol de cabras para su explotación.

Fuente: ladepeche.fr

El negocio de las cabras es totalmente complementario a la elaboración de cervezas. Las cabras también comen bagazo de lúpulo, cebada y levadura, y su estiércol produce el gas natural necesario para mantener energéticamente el proceso de elaboración de cerveza cerrando así el círculo.

Todo esto nos lleva al paradigma de las “bieres de garde” elaboradas tradicionalmente para completar y llenar los tiempos muertos que dejaba la agricultura y ganadería.


L’AMALTHÉE

Estamos ante un producto orgánico, para su elaboración se utilizan cebada cultivada en la granja, agua de un manantial cercano de los Pirineos, el lúpulo es cultivado orgánicamente en Alemania y la levadura también es comprada externamente.

Sin mucha información procedí a probar esta cerveza, al quitar la chapa un buen estallido de gas saliendo rápidamente de la botella. Al verterla en la copa, su apariencia es excelente, genera una buena capa de espuma blanca, cremosa y persistente. El color se encuentra entra ámbar claro y dorado. Levemente nebulosa y una carbonatación bien visible.

Aroma rústico, pero sutil, muy herbal y afrutado (una mezcla de manzana y limón). En la nariz también se hace perceptible alguna nota floral y algo terroso al fondo. 

El sabor confirma mis sospechas, estamos ante una maravillosa cerveza, los mismos matices pero más intensos. Dulce maltoso, afrutado y herbal. También algo de miel. En boca es agradable con un toque picante y chispeante. El alcohol bien presente en este tipo de elaboraciones también está ahí, pero bien integrado. Tiene un buen cuerpo y el regusto final deja un sabor sutil a miel y menta. 


CONCLUSIONES

La primera conclusión es la sorpresa, parece mentira que siendo las Bieres de garde uno de mis estilos asiduos y de las que me doy de conocedor, no tuviera constancia de esta cerveza, al parecer todo un clásico en el estilo.

Me gustaría aclarar es que a pesar de que he leído varias referencias que califican a esta cerveza de “Saison”, en mi opinión totalmente equivocadas. Estamos ante la típica “Biere de Garde” francesa, más dulce y maltosa y menos lupulada y especiada que su equivalente belga.

Es el paradigma de la elaboración rústica, elaborada con pocos medios mecánicos por un granjero, materias primas naturales y aprovechando los medios que tiene a mano, pero ciertamente no queda ahí todo, a la vez es una elaboración refinada. Dentro de su complejidad mantiene un excelente equilibrio, todo está en su sitio y todo parece encajar, ni una nota discordante. En mi opinión, excelente e impecable.

En mis primeras opiniones y valoraciones suelo tirar “a la baja” pero creo que podría decir sin temor a equivocarme que es una de las mejores Bieres de Garde que he probado, esperemos que se vuelva a cruzar en mi camino para poder confirmar todas estas impresiones.



Valoración de El Baúl de las Cervezas: 8,5/10


Ficha Técnica:
Fabricante:
Ferme Brasserie Lebbe.
Elaborada en:
Villefranque (Francia).
Estilo:
Biere de Garde.
Color:
Dorado/Ámbar claro.
Alcohol:
6% Alc.
IBUs:
N/A
Temperatura:
10º C.
Servir en:
Copa Tulipa.

martes, 20 de septiembre de 2016

VISITA A BRASSERIE LA DÉBAUCHE

Angoulême es una ciudad del sudoeste francés situada a orillas del río Charente y conocido por su festival del comic. A parte, cuenta con un interesante centro histórico con su catedral de estilo románico, sus murallas al lado del río y un puñado de edificios interesantes.

Pero para nosotros Angoulême es un lugar de paso en nuestros viajes, así que cuando me enteré hace unos meses que Brasserie La Débauche estaba situada en esta ciudad, se convirtió en una visita ineludible. En mi opinión, La Débauche pasan por ser una de las micros más consistentes aparecidas en los últimos años en el panorama cervecero francés.

Así que, un día caluroso de julio nos presentamos a la puerta de la cervecería con la intención de comprar algunas cervezas.


LOCALIZACION, LLEGADA Y APARCAMIENTO

Brasserie La Débauche se encuentra en el número 22 del Bulevard Besson Bey. El edificio donde está situada se identifica fácilmente, es una nave blanca con cierto aire modernista. Delante hay dos o tres plazas de aparcamiento, pero si se encuentran ocupadas no es difícil encontrar donde aparcar en las proximidades, ya que hay varias plazas a lo largo de la calle y una pequeña zona de aparcamiento al lado de la rotonda cercana.



INSTALACIONES

Lo primero que sorprende al entrar es el reducido tamaño de la nave y las instalaciones, mucho más pequeñas que la mayoría de las fábricas que hemos visitado. Al fondo, se encuentra situada la maquinaria necesaria para la elaboración y el resto para el almacenaje de materias primas, barriles y otros utensilios. Cerca de la entrada un pequeño expositor donde se encuentran algunas de las referencias de este productor. A la derecha una sala, a modo de oficina de donde sale un hombre a atendernos.


Nuestra idea es únicamente comprar cerveza, pero estamos de suerte. En ese momento la actividad permanece detenida ya que acaban de recibir los nuevos tanques fermentadores y se encuentran pendientes de instalación. Así que se ofrecen a enseñarnos las instalaciones y hablarnos de su proyecto como si de una visita guiada se tratase. Los cinco nuevos tanques de fermentación incrementarán su producción enormemente, nos los enseñan con orgullo por el salto cuantitativo que representan para este pequeño productor.



CURIOSIDADES

¿Quiénes son Brasserie La Débauche? Este proyecto nace de la pasión de un par de amantes de la cerveza, así que, estamos ante un pequeño negocio familiar. De hecho, las tareas se la reparten entre los dos matrimonios, desde las tareas de fabricación a las comerciales y administrativas.

Nos hablan de las impresionantes etiquetas que adornan sus botellas, para ello han buscado la colaboración de artistas locales relacionados con el tattoo y el comic. Ciertamente es fácil identificar estos estilos en las etiquetas. También nos comentaron que para su cerveza “Wild lab” fue un artista parisino quien se ofreció a hacerles la etiqueta, lógicamente no pudieron negarse.

Nos hablaron de sus próximos proyectos, muchas colaboraciones en el horizonte, también con algún elaborador español y seguro que un montón de buenas cervezas.

¿qué se estará preparando dentro?


SUS CERVEZAS

Como toda visita que se precie, acaba con una cata de algunas de sus últimas elaboraciones, sacadas directamente del frigorífico. En un día en el que nos acercábamos peligrosamente a los 40ºC se agradece enormemente.

A La Débauche los conocíamos sobre todo por sus excelentes cervezas oscuras, pero he de confesar que el resto de cervezas de su portfolio (más de 20 cervezas que abarcan los principales estilos de moda) no son menos sorprendentes y creativas.


Durante la visita nos presentaron el que sería su próximo lanzamiento Amorena una cerveza oscura  de 14% de contenido alcohólico envejecida en barricas, con almendra amarga, amarenas (un tipo de cereza silvestre) y envejecida en barricas de cognac… espectacular!!!



CONCLUSIONES

Buenas cervezas, que van más allá de las típicas creaciones añadiendo un toque de creatividad que lo convierten en uno de los productores más interesantes del panorama cervecero galo actual.

La gente de La Débauche fueron muy amables y nos brindaron una visita muy interesante, donde nos trataron muy bien y nos transmitieron la pasión por lo que hacen y su buen humor. 

Así pues, la conclusión no puede ser otra… Volveremos!!! Y seguro que así será.




Brasserie La Débauche
22 Boulevard Besson Bey, 1600 Angoulême
Teléfono 06.63.98.90.91.

Web: www.brasserie-ladebauche.com

jueves, 15 de septiembre de 2016

MIS CERVEZAS DE AGOSTO 2016

Ante la más que previsible llegada del mal tiempo he estado estas primeras semanas de septiembre aprovechando cada rayo de sol. Ahora que desde mi ventana puedo ver la caída incesante de la lluvia y de las temperaturas es hora de sentarse y escribir el resumen de lo que fue cerveceramente el mes de Agosto. Estas son algunas de las cervezas que pude probar:

TO ØL  MY PILS

To Øl es algo más que esas excelentes cervezas negras lupuladas, y un buen ejemplo es esta “My Pils” que a pesar de su nombre, poco me ha recordado a una pilsner. Aunque un festival de cerveza no es el lugar más apropiado para tratar quedarse con los matices de una cerveza creo que voy bien encaminado con la siguiente descripción:

Es Dorada, tiene una espuma blanca que se va reduciendo lentamente. Es una cerveza bastante aromática, predomina el lúpulo, cargado de notas frutales (cítricos). El sabor es menos intenso, es dulce, afrutada, con notas cítricas. En boca es ligera y tiene un final amargo y seco

Como conclusión, podemos calificarla como una cerveza interesante. Ligera, fresca, con un buen aroma y un sabor agradable. Evidentemente una buena opción para el verano, aunque no por ello exenta de calidad. Al final aportó un plus sobre mis expectativas.

Valoración de El Baúl de las Cervezas: 7/10


MONSTEIN HUUSBIER

De entre todas las interesantes cervezas que ofrece Monsteiner BierVision (por lo menos hace unos años, la cervecería situada a mayor altitud de Europa) esta Huusbier, traducido del dialecto suizo algo así como “la cerveza de la casa", es la más conocida.

Es una aparentemente sencilla cerveza sin filtrar a la que muchos acercan a las “kellerbier” o a las “Zwickelbier” alemanas… yo más bien diría a estas últimas. Es dorada con una buena y persistente corona de espuma blanca. El afamado periodista cervecero Michael Jackson en su visita a Monsteiner dijo de ella que tenía un aroma dulce a malta, notas a galleta, nuez y vainilla. Con un final seco y un toque ácido. No tengo nada más que añadir.

A pesar de ser reconocida como su mejor cerveza, en mi caso tengo dudas si me gusta más su dunkel o esta. En todo caso, tiene suficientes argumentos para ser una cerveza habitual, fácil de beber y un agradable sabor, que más se puede pedir en una cerveza de este estilo.

Valoración de El Baúl de las Cervezas: 7,75/10


DOCTEUR GAB’S TEMPÊTE

Docteur Gab's fue uno de los descubrimientos en mi visita a Suiza en el 2015 y que tenía anotado en mi agenda desde entonces y después de probar esta Tempête seguiré teniendo en ella.

Si me dicen que es belga, me lo creo… pero no es una cerveza Suiza al más puro estilo “Belgian Strong Ale” de muy buen aspecto, con una pequeña cabeza de espuma blanca que se reduce rapidamente a una fina capa de espuma pero que aguanta ahí toda la degustación. Va dejando distintas lazadas y encajes. De color dorado, algo turbia, parece que por alguna partícula de levadura en suspensión.

El Aroma dulce, floral, a manzanas, especias (nuez moscada) y un toque picante y para redondear la cerveza su sabor es dulce a miel, con levadura, limón y lúpulo floral. En boca es chispeante y el alcohol es detectable, aunque no hasta el punto de su graduación, lo cual la convierten en una cerveza peligrosa. Para finaliza el regusto es a miel y alcohol a partes iguales. Una muy buena interpretación de una cerveza belga, me ha gustado.

Valoración de El Baúl de las Cervezas: 7,75/10


BFM DEGUSTATOR 2016

Tenía cierto interés en probar esta edición limitada Degustator 2016 (Marius Edition) comprada en las instalaciones de BFM este verano. Una cerveza de trigo que podría incluirse en cualquier frikicata de estas que están de moda.

Lo primero que llama la atención es la sorprende y exótica la lista de ingredientes, sin duda una selección muy cuidada. La pregunta es ¿aportan algo distinto la miel de naranjos de Cerdeña, el trigo del Jura, los lúpulos de Alsacia, las flores de naranjo, la pimienta blanca de Borneo y las bayas rojas de las Islas Reunión? Quizás no.

Centrándonos en la cerveza, diremos que tiene un color entre ámbar y anaranjado. Como buena cerveza de trigo es turbia y con una duradera y cremosa espuma beige. Quizás porque lo había leído en la etiqueta, pero tanto en el aroma como en el sabor se detecta ciertas notas exóticas. Es floral, cítrica, con notas a miel y especias. Buen cuerpo para el estilo y una sensación picante en boca con un final amargo.

Su mejor virtud el equilibrio en sus matices. Muy buena cerveza de trigo pero quizás me esperaba más para una cerveza tan cuidada y vendida a precio de "Bon chien". Con todo ello, una cerveza más que notable.

Valoración de El Baúl de las Cervezas: 8/10


LA DEBAUCHE WILD LAB #HOPPY_SAISON

Fue una de las sorpresas de la visita que realizamos a las instalaciones de La Débauche en Angoulême (Francia) este verano, ya que acababan de sacarla al mercado. Durante el invierno había probado algunas cervezas de este elaborador, todas ellas oscuras y espectaculares, así que tenía curiosidad como eran sus cervezas de otros estilos.

Me había despistado la denominación “Wild” y me esperaba algo ácido, debería haberme fijado más en las palabras “Hoppy Saison” que definen mejor lo que es esta cerveza. Evidentemente la denominación “Wild Lab” del nombre hace referencia a una serie de cervezas en la que esta cervecera experimenta utilizando distintas técnicas de elaboración.

Color anaranjado, una buena capa de espuma. El aroma es espectacular, los lúpulos se dejan notar, es floral y afrutado con notas resinosas. En el sabor los lúpulos son también los protagonistas, es complejo y con muchos matices, pero vuelven a manifestarse matices afrutados y resinosos. Bien equilibrada y como todas las cervezas de este elaborador, en boca son fornidas con buen cuerpo y con un final amargo y seco. Gran cerveza.

Valoración de El Baúl de las Cervezas: 8/10


LOST ABBEY CUVÉE DE TOMME

Descubrí esta cerveza en aquel libro de las “100 cervezas belgas que tienes que probar antes de morir” que incluía una sección de cervezas de inspiración belga de otros lugares del mundo. Su nombre en honor al jefe de operaciones de Lost Abbey, Tomme Arthur. Ha sido una de las cervezas más galardonadas de esta cervecera. Sin duda estamos ante una cerveza muy especial elaborada con cebada malteada y cerezas y que sigue un proceso de envejecimiento en barricas de roble donde se añade una buena cantidad de brettanomyces.

Siguiendo como guía el libro comentado, vemos que tiene un color que recuerda a la Liefmans Kriek, oscuro con destellos rojizos. El aroma es complejo y delata la utilización de cerezas, es algo alcohólico y se nota que estamos ante una cerveza envejecida en madera, las notas a vainilla lo delatan, al fondo se adivinan los bretts. En el sabor  se mezclan el sabor a roble y las cerezas ácidas, pero también notas a uvas pasas y muchos más matices que se van revelando poco a poco. El final es ácido.

Es una cerveza muy compleja, de esas para tomar sin prisas y saborear cada sorbo minuciosamente. Como aficionado al envejecimiento de cervezas Lost Abbey siguen siendo una de mis marcas de referencia y cada una de sus cervezas, un acontecimiento en si misma.

Valoración de El Baúl de las Cervezas: 9/10