No soy juez de la BJCP, tampoco tengo la certificación Cicerone
ni otras por el estilo, no va con mi forma de ser y aunque en este blog esté
lleno de valoraciones y catas, prefiero disfrutar de la cerveza y todo lo que
la rodea. Aquello que no me gusta, simplemente no tiene lugar aquí.
No soy elaborador y aunque entiendo el proceso de elaboración, prefiero
disfrutar de las buenas cervezas de otros a tener que beberme a regañadientes
aquella que un día intenté y finalmente se fue por el fregadero.
Dicen que soy un experto en cerveza, pero no es cierto,
simplemente me gusta enterarme de todo aquello que rodea esta bebida,
documentarme y aprender de aquellos que sí lo son.
Soy alguien que añora aquellos tiempos en los que ningún
pequeño elaborador de cerveza estaba preparado para recibir a un molesto
turista que se metía en sus instalaciones hasta la última esquina y a quién
aguantaban quizás con la esperanza de una buena venta… que finalmente conseguían.
Soy aquel que un día por necesidad empezó a acumular las
cervezas que traía de sus viajes en un viejo baúl y que como no podía beber todo
a corto plazo, descubrió por casualidad el añejamiento de cervezas y ahora es
un fiel devoto de sus virtudes.
Soy un entusiasta de la cerveza que no cree en la cerveza
industrial-comercial, ni en la artesanal, ni en el homebrewing… y solo cree en
la cerveza que le gusta, venga de donde venga.
Soy un amante de las cervezas rústicas, de las trapenses, de
las envejecidas en barrica y todas aquellas que me transporten a lugares
idílicos donde un día fui feliz.
Por que, en definitiva simplemente soy un aficionado al
mundo de la cerveza, al que llegué cuando era muy joven y del
que desde entonces no he abandonado… ni quiero.
Este es mi blog, aquel que llevaba media vida amenazando con
escribir y que 20 años después comencé a escribir como terapia para llenar mi
tiempo. Podréis encontrar mis opiniones y reflexiones, las cervezas que bebo,
los lugares que visito y por supuesto todo lo que tengo guardado en mi Baúl de
las Cervezas.
Saludos,
MIGUEL
Me encanta tu blog y ademas creo que nos conocemos o al menos te conozco de vista compartimos pasion por la btt y la birra , sigue dandole vida a este blog que vale para muchos como yo a diferenciar estilos y a conocer nuevas birras un saludo y gracias de parte de ibra
ResponderEliminarGracias Ibra, pues sí, soy yo... y tenemos aficiones compartidas. Me suena tú nombre pero ahora no te pongo cara, si nos encontramos por alguna caleya párame y compartimos kilómetros y conversación.
EliminarSaludos,
Me encanta este blog Miguel!! Lo acabo de descubrir buscando algo de información sobre la Mahou barrica y me he enganchado leyendo más artículos!
ResponderEliminarSigue así porque se nota que tienes pasión por la cerveza para que tus lectores aprendan cosas!
Muchas gracias Oscar, me alegro de que te guste este blog, siempre es agradable leer comentarios como este y animan a seguir escribiendolo.
EliminarSaludos,
Hola,
ResponderEliminarYo también estaba pensando en empezar a coleccionar etiquetas de cerveza, ya que las botellas se me empiezan a acumular... Como haces para guardarlas en albumes? Cuales son los couidados requeridos??
Hola Manu,
EliminarLas etiquetas las guardo en hojas albums de fotos, de esas que tienen una cubierta de plástico que se levanta y se colocan las fotos. Cada vez más difíciles de encontrar por cierto, así que últimamente los he comprado en "los chinos".
Una vez colocadas las etiquetas en el album no hay que tener ningún cuidado especial.
Previamente lo de siempre, para retirarlas de la botella, con agua caliente y jabón si están pegadas con cola y aplicando calor (con un secador o similar) si la etiqueta es una pegatina. Si la etiqueta está algo arrugada suelo meterla entre las hojas de un libro con peso encima.
Espero haberte aclarado las dudas.
Saludos!!!