Hay cervezas que recuerdas perfectamente cuando y donde las
tomaste por primera vez, y cada vez que las pruebas te vuelve a transportar a
aquel lugar.
Lunes por la mañana, paseo tranquilamente por las calles de
Bruselas. Un día de relax en un ajetreado viaje durante el verano de 2006.
Siempre me voy fijando en qué está bebiendo la gente en las terrazas de las cervecerías,
es algo instintivo. Al pasar por delante de una de ellas, no pude retirar la
mirada de un anciano de barba blanca que saboreaba una cerveza con verdadero deleite.
Al lado, en la etiqueta de la botella se podía leer “Moinette blonde”.
En otra mesa, dos hombres de negocios, supuse por sus
trajes, conversaban mientras el camarero les servía esa misma cerveza… y perdonar
mi ignorancia, pero yo no conocía aquella cerveza. Miré de nuevo al anciano
mientras acercaba la copa a sus labios y bebía lentamente, como si quisiera
alargar el tiempo que la cerveza fluía por su boca.
Al instante sentí la necesidad de beber aquella cerveza y sin pensarlo mucho me senté en una mesa cercana al anciano. El
camarero se acercó y le dije “quiero una de esas” señalando a la botella. Casi al
instante tenía una “Moinette blonde” en mi mesa.
Ah, una Dupont!!! Solo hacía unos meses que distintas
publicaciones habían ensalzado su Saison como una de las mejores del mundo. Sí, esa misma que Michael Jackson salvará de su extinción, las vueltas que dan las
cosas, es una cerveza espectacular. Pero esta “Moinette”, lo dicho, ni idea.
La vertí en la copa, su
color era entre rubio y anaranjado, ligeramente turbia. Rápidamente se
creó una buena capa de espuma blanca. Acerqué la copa a la nariz y descubrí un suave
aroma cítrico y especiado… pimienta, clavo y cilantro… era agradable.
El primer sorbo fue inconfundible, ahí estaba la esencia de
las grandes belgas, el alcohol por delante y a pesar de todo un sabor
sofisticado donde tomaban protagonismo el toque especiado que ya había
detectado en el aroma. De entrada, diría que
estaba a medio camino de una “Belgian Strong Ale” y una triple de
abadía.
La sensación en boca era seca. A cada sorbo la espuma iba
creando bonitas lazadas en las paredes de la copa. A medida que iba adquiriendo
temperatura iban revelándose nuevos matices, ahora el cilantro era más
evidente. En todo momento muy equilibrada y con mucho cuerpo.
¿Moinette? tendrá algo que ver con “monje”, sí puede ser un
pequeño monje… posteriormente descubrí que en realidad hace referencia a la
zona donde se encuentra la cervecería, aunque originariamente la cerveza
recibió el nombre de “Abbaye de la Moinette” en un claro juego de palabras para
una evidente "Tripel" de abadía.
Seguí pensando, ¿Qué tal le sentará el paso del tiempo? Es una cerveza con 8,5% de contenido
alcohólico y con refermentación en botella, así que facultades tiene y así,
entre sorbo y sorbo, ensimismado en mis pensamientos la cerveza se acabó, miré
a mi alrededor el anciano ya se había ido pero me había dejado una lección,
ahora sabía que esta “Moinette Blonde “se convertiría en un clásico en mi bául
de las cervezas... y así ha sido.
Valoración de El Baúl
de las Cervezas: 8,5/10
Ficha Técnica:
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Fabricante:
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Brasserie Dupont
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Situación:
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Tourpes-Leuze
(Bélgica)
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Estilo:
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Triple de Abadía
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Color:
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Dorado anaranjado
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Alcohol:
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8,5º
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IBUs:
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N/A
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Temperatura:
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10-12º C
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Servir en:
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Copa Caliz
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Tiene esa pinta de un clasicazo con mucha historia en su interior. Siempre sientan bien.
ResponderEliminarSaludos!
Hola Rul, pues sí, lo es, en bélgica es todo un clásico que tiene muy buena aceptación... quizás mucho más que otras de Brasserie Dupont que a nosotros nos parecen excepcionales, como la Saison. Sin embargo fuera de las fronteras belgas no parece ser tan conocida.
EliminarSaludos